Síntomas frecuentes del Parkinson:
– Temblores: Lentos y rítmicos. Predominan estando en reposo y disminuyen al hacer un movimiento voluntario. No necesariamente los presentan todos los pacientes.
– Rigidez muscular: Resistencia a mover las extremidades, hipertonía muscular.
– Bradicinesia: Lentitud de movimientos voluntarios y automáticos. Falta de expresión de la cara. Escritura lenta y pequeña (micrografía). Torpeza manipulativa.
– Anomalías posturales: Inclinación del tronco y la cabeza hacia delante. Codos y rodillas están como encogidos.
– Anomalías al andar: Marcha lenta, arrastrando los pies. A veces se dan pasos rápidos y cortos (festinación), con dificultad para pararse. Episodios de bloqueo (los pies parecen que están pegados al suelo).
– Trastorno del equilibrio: Reflejos alterados, fáciles caídas.
Estos síntomas no siempre se presentan juntos, pero puede darse cualquier combinación de éstos. La asociación de dos o más de estos síntomas se denomina parkinsonismo. Síntomas asociados o secundarios:
- Cambios en el tono de voz que se torna más débil.
- Cambios en el semblante que se vuelve menos expresivo.
- Síntomas psíquicos: ansiedad, depresión y disminución de la libido.
- Trastornos del sueño: insomnio, fragmentación del sueño y sueños vividos.
- Síntomas sensitivos: rampas, hormigueos, e incluso, dolor en alguna extremidad.
- Trastornos leves del sistema nervioso autónomo: estreñimiento y aumento de la sudación.
- Alteraciones cutáneas: eczema seborreico, que afecta fundamentalmente la piel de la cara y el cuero cabelludo.
- Disminución del sentido del olfato.